Permaneciendo en línea

En un mundo donde tenemos rutinas para casi todo, nuestra ruta a trabajar, régimen de salud y el horario de los días laborables, es asombroso a cuántas personas se les olvida crear una rutina para encontrar sus necesidades espirituales. Corremos en una vida acelerada en el intento de cumplir con todas nuestras obligaciones y llegar a tiempo a nuestras citas. Todo por el esfuerzo de ser lo más productivos posible, sin embargo, nuestras necesidades espirituales tienden a quedarse en el asiento de atrás. Después de todo, las necesidades espirituales no pagan directamente las deudas o tonifican nuestros músculos. Algunos se pueden preguntar que quién tiene tiempo para meditar o escribir en un diario cuando hay cosas mas importantes en las que debemos enfocarnos. La verdad es que cuando nos nutrimos espiritualmente obtenemos la energía que necesitamos y el balance que permite mantener nuestras vidas en línea.

La forma en que cada uno decida nutrir su vida espiritual es decisión personal. Para algunas personas, meditar una vez al día es lo que necesitan para mantenerse centrado. Mientras que estar de 10 a 20 minutos con los ojos cerrados y manteniendo una mente clara puede parecer como mucho tiempo de no hacer nada. Sin embargo, este estado de “no hacer” nada permite realmente que usted permanezca en calma y enfocado, así usted puede ser tan productivo como sea posible. Escribir en un diario permite mantenerse en contacto con sus sentimientos. Repetir afirmaciones de éxito, felicidad y bienestar en forma regular puede ayudar a que viva de manera optimista y entusiasta y a crear la vida que usted desea.

Tener una rutina que permita alimentar de energía su alma puede servirle bien si su vida toma repentinamente una vuelta inesperada a un período difícil. Nutrir el alma le permite no solo permanecer en línea con su camino de vida, sino también que su camino de vida permanezca con lo que su alma desea.